sábado, 25 de abril de 2015

Inferno-Purgatorio-Paradiso

El camino de la salvación comienza descendiendo hasta el infierno.

Esto puede parecer ilógico, pero cuando tú mismo eres el verdadero peligro para tu persona debes huir de tu autodestrucción y tus debilidades sumergiéndote en tu propia oscuridad. Sólo allí, en la negrura de tu corazón y de tu mente, en el mismo infierno de tu alma, podrás encontrar el diestro camino de tu senda perdida y comenzar a encontrarte a ti mismo. Lo que te permitirá dejar de errar en tus decisiones y actuaciones y comenzar el ascenso al cielo, a la salvación. No en el sentido divino, sino en el humano, pues sólo con tu auto-conocimiento en el purgatorio de tus dudas podrás comprenderte a ti mismo y aceptarte a ti y a tu persona. Logrando una percepción más completa de tu ser.

Sólo el infierno te permitirá entenderte para auto-purgarte y estar en paz contigo mismo.

Tu paraíso personal.

viernes, 24 de abril de 2015

¿Y qué fue Portugal?

¿Y qué fueron esos meses
más que mirar al futuro
buscando siempre el mar?

¿Y qué fueron al pensar,
si no que la flor de un amor
y el clavel de la libertad?

¿Y qué otra cosa fueron
más que un recuerdo castellano
anacrónico en Portugal?

¿Y qué fueron
si al mirar atrás
sólo hay melancolía y un querer regresar?

¿Y qué fue Portugal?
Otra huella en la memoria,
otra línea en el alma,
otra historia que recordar.

miércoles, 15 de abril de 2015

La oscuridad

La oscuridad.

Dale que vive
en un pozo de luz
del alma.

Callada,
como un pozo
sin fondo
que acoge
el mundo en sus brazos.

Callados,
en silencio,
ojos sin vida,
báculo de los muertos.

La arista del cubo
es 13, huye y grita.

Se excita el alma
en la niebla diáfana;
pues sólo salve, salva y pesa
la vida que no pisa.

Muertos en vida
muertos en fosas muertas.

El ciego no ve
lo que el corazón no dicta,
quizás envasa la tinta;
sin pausa,
sin prisa;
como un poema de gesta
que cuenta la rima.

Ten cuidado,
no todo el oro brilla,
y a veces nos perdemos en la vida.

Como un murmullo,
lejano,
silencioso,
sin ruido ni ira,
porque despacio
                     no se nota
                              el paso
                                    del raso
                                          que lucha
                                                    sin descanso,
cuidado
que los versos sueltos
              marcan el viento
                      y se llevan
                           todo lo que cita
                                    en verso libre
                                                 en rima
y pasa
sin pausa
la vida
en un pozo de oscuridad
en un pozo de vida.

Que un infierno en la tierra
es la vida misma
que un túnel al final de la luz
es un farolillo sin gasóleo ni chispa.

Que la esperanza se encoje cada día,
que la luz convive con la vida.

Que sin oscuridad no hay sombra
y sin sombra no hay luz en la vida.

Que el pozo sin fondo siempre tiene salida.