domingo, 13 de abril de 2025

Te busco en Concarneau

A más de 1000 km de distancia,
yo busco el mar
para sentir que el suave vaivén ondulante
de la marea en la orilla
me acerca a ti,
me hace sentirte más cerca.

Y es que sin ti cualquier poesía me sabe a poco,
cualquier mar está un poco más vacío,
nosotros,
que somos de horizontes atlánticos,
nos buscamos en la lejanía,
en el infinito entre el cielo y el océano,
para atrapar el instante,
hacerlo nuestro
y recordarnos
como recordamos las tardes en el muro de Ericeira,
dos nutrias, a fin de cuentas,
que se dan la mano 
en el Atlántico
para que no se las lleve nunca la marea.

En tu rincón de Concarneau

Estoy sentado en las rocas que tú te sentabas, y te echo de menos, supongo que estar aquí es mi forma de sentirte más cerca, de sentir que estás viajando conmigo por la Bretaña.

A más de 1000 km de distancia,
yo busco el mar
para sentir que el suave vaivén ondulante
de la marea en la orilla
me acerca a ti,
me hace sentirte más cerca.

Y es que sin ti cualquier poesía me sabe a poco,
cualquier mar está un poco más vacío,
nosotros,
que somos de horizontes atlánticos,
nos buscamos en la lejanía,
en el infinito entre el cielo y el océano,
para atrapar el instante,
hacerlo nuestro
y recordarnos
como recordamos las tardes en el muro de Ericeira,
dos nutrias, a fin de cuentas,
que se dan la mano 
en el Atlántico
para que no se las lleve nunca la marea.

jueves, 3 de abril de 2025

Bretaña

Corren los campos en el paisaje
veloz
como árboles fugaces
y prados constantes.

El sol se sostiene
y el verde resplandece
no es aún primavera aquí,
pero el paisaje avanza
sin frenos.

miércoles, 2 de abril de 2025

Frente al dique del puerto

Golpea el viento incesante
sobre el puerto de Binic,
los mástiles suenan,
los barcos ondean,
y el sol baña la piel
pese a erizarse
por el viento
que no frena.

miércoles, 19 de febrero de 2025

Pleure pas

¿Cuál es el sentido de esta existencia?

Entre tanto mal y tanto bien...
¿Cuál es el sentido de esta existencia?

Nos perdemos en nosotros mismos, en nuestros errores y aciertos y somos incapaces de salirnos del propio sendero que nosotros mismos nos construimos.

¿Hay alegría cuando no se celebran las alegrías?

¿Hay tristeza cuando solo reina la tristeza?


Sombras informes que susurran palabras, silencios, nombres,

desastres extraños y ajenos que hacemos nuestros por un mero intento de reconstruirnos a nosotros mismos tratando de arreglar las grietas que tienen las personas con las que nos encontramos:
claro intento egoísta
de superar las heridas que causamos a otros

¿cuándo no podemos sanar a quien dañamos
intentamos arreglar a otros para reparar esa cicatriz que hemos originado?


Respuestas sin preguntas, preguntas sin respuestas, preguntas que no hacemos, respuestas que no damos, preguntas que evitamos y mientras tanto se pierden en el viento
para que nadie sepa el miedo que tenemos
a la noche, a la oscuridad, al silencio,

locos artífices de sueños

que sucumben al tiempo

conscientes
de que las ruinas
seguirán ahí
cuando nosotros nos rindamos
y nos marchemos.


Nadie aguanta demasiado reparando las heridas que otros han causado por nosotros 
porque nosotros decidimos no tener el tiempo suficiente para causarlas.

domingo, 16 de febrero de 2025

¿Reconciliación?

Cada vez que se pierde la atención, se hiere a alguien. Y ese alguien es siempre uno mismo.
Haru - Flavia Company



Cuando no hay límite, no hay límites.

Solo una sucesión de malas decisiones
que nos arrastran por este laberinto
que desciende lentamente hasta los infiernos.

¿Existe la posibilidad de huir de nuestros propios miedos?

¿O son nuestros propios miedos los que nos paralizan
y la vida consiste solo en reconciliarnos con ellos?

¿Es la vida reconciliación? ¿Reconciliación constante?



Cuando no hay límite, no hay límites.
Cuando llega un límite, llega el límite de todo.

¿Estamos abocados a ser siempre así?

Cimbrea la vida con la fragilidad de una hierba movida por el viento,
tomamos decisiones sin prever las consecuencias
y cuando estas llegan
nos escondemos,
incapaces de asumirlas.

El dolor de la soledad,
de una existencia
que al llegar el final del día
solo queda eso,
soledad en medio de un desierto de arena.

¿Qué sentido tiene la vida?
Buscamos la estabilidad entre el caos
y cuando todo se agrieta
y resquebraja
tratamos de hacer equilibrios con los escombros
intentando que no se derrumbe de golpe todo.

¿Es esto a lo que aspiramos?
¿Es esta la vida que queremos?
Jugar a las escapadas con nuestra propia felicidad...
Como si no importase nada más que el instante que se consume
y luego no queda nada...
no queda nada más...