porque pintará versos con tus labios entreabiertos sucumbiendo a la noche perdida,
nunca te enamores de un poeta
porque escribirá realidades sobre espejismos de ilusiones,
nunca te enamores de un poeta
porque llevan en la sangre el veneno de la infinita inquietud
y nada será suficiente
y siempre lo querrán todo
y se consumirán tan rápido que si descuidas te harán arder.
Y eso en el sexo está muy bien
pero en la vida...
En la vida fluirás y comprenderás que el viaje es su razón de ser.
Y será entonces
cuando nada baste,
cuando todo sobre,
cuando te darás cuenta
de que un poeta no es lo que querías tener.
Fuego en la cama,
brisa atlántica tras los cristales.
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