de noches en que las pesadillas invaden mi almohada
de sucumbir en el duelo mente contra alma
de caer una y otra vez tras infinitas caídas con la mirada velada
de no poder escapar de mis ojos de mar vidriada
de perder tantas batallas frente a la tempestad antes que mi calma
de no ser capaz de soportar la cruenta duda olvidada
de no ser quien de esquivar la irracional oleada que me atrapa
de no poder plantar nunca cara.
Estoy cansado de toda esta patraña
de incansables oleadas,
quiero hacer que el corazón sea quien me guía a otra madrugada
beber lento la cerveza de una lata
mientras las olas rompen suavemente en las arenas de la playa,
querer hojas al viento, cuidarnos los miedos,
tejer amistades que abrazar cerca y lejos,
dibujar sueños en las sábanas,
aderezar palabras en poemas que no defraudan,
destejer mi interior como una maraña de te quieros,
alcanzar las nubes y el cielo,
creerme eterno aún sabiéndome frágil instante de recuerdo,
colgar fotos en blanco y negro en las paredes de mi habitación
tocar con los dedos el sol,
tocar locuras en clave mayor,
ser feliz sin condiciones
ser feliz sin conclusión
soportar los vaivenes por ver siempre más allá
ser quien no tambalea ante el peso ajeno
quererme con pasión,
ser huracán y ciclón
ser una poesía para amar la razón,
tocarme el alma
acariciarte la mirada
colorearte la vida con dulces juegos de palabras
mientras la Ría nos cobija bajo sus alas
desplegar el atardecer ante las prisas de vivir con calma
ser libertad nunca callada
rozar la paz y delirar por tu espalda
ser un firme escritor feliz al que dolor y el sufrimiento nunca quebranta.
Ser sin tregua ni condiciones ni destierros
ser un dulce poeta que camina siendo lucero.
Destelleante luz del atardecer que bañan mis sueños.
Madre mía! No tengo palabras!!!
ResponderEliminarLa poesia normalmente me cuesta...pero hoy he conectado de lleno con tus versos. Desde el principio me he quedado extasiada leyendo.
"Tener amistades que abrazar cerca y lejos"
Precioso. Voy a pasar por tu blog más a menudo.
Un abrazo