jueves, 9 de septiembre de 2021

Foto de Monte Alto

Estoy escribiendo frente al teclado y una foto de Monte Alto. Amanece en el otoño de 2015. Las cosas eran bonitas, más que ahora. Mucho más que ahora. También todo era más fácil. Ahora me siento un poco menos solo. Miento, en general no me siento solo. A veces sí. Pero son las menos veces, tengo que reconocerlo. Ahora sí tengo gente. Aunque la mayoría esté a cientos de kilómetros de distancia. Pero he aprendido a sobrellevarlo
aunque las vea solo,
con suerte,
una o dos veces al año.

Estoy nostálgico,
es normal,
afuera llueve,
mucho,
una cortina de gris tristeza otoñal
así que me pierdo en el otoño de hace ya 6 años
y escribo
por intentar emularme
aunque sea un poco,
a veces creo que escribía mejor,
sobre todo cuando me leo.
Escribía mejor.
Sin duda.
Ahora solo aporreo las teclas sin saber muy bien qué contar,
como antes,
pero sin la destreza para hilar rimas, palabras, imágenes y metáforas.
Supongo que tenía una mente más ágil
o la poesía fluía más,
no lo sé,
no estoy seguro.

Mientras tanto escribo.
Porque
¿qué otra cosa iba a hacer?

Miro la foto de Monte Alto
y lo echo todo de menos:
el amor,
las risas,
los recuerdos,
a quiénes éramos,
a quién tenía,
y a la niña de la mirada siempre sonriente.

Soy feliz con la gente que tengo ahora,
no las cambio
ni las cambiaría,
ellas me dan vida
(mis amigas),
pero si pudiese...
sería más feliz teniendo también a quien tenía.
Aunque sea imposible.

También todo era más fácil
y aunque tantas cosas hayan cambiado
y todo sea tan diferente...
podría resumirlo de forma fácil,
bastante sencilla...
y es que miraría por la ventana
mientras la lluvia cubre el fondo,
luego a la foto
y teclearía
con cuidado de no despertar a los demonios
que tengo casi todo lo que quiero,
algún que otro miedo
y que todavía tengo por cumplir deseos.


Echo de menos Monte Alto,
me quiero
y lucho por seguir
para que te sientas orgullosa de ello.



* * *



Al final lo resumiría en que todo sigue igual:
un par de viajes y un par de sueños
y algún que otro talismán
que sigo llevando al cuello.

No hay comentarios:

Publicar un comentario